Cada uno debe tener su propia explicación de por qué lee. Confieso que no era un buen lector, pero las circunstancias me llevaron a refugiarme -esa es la verdad- en los libros. La pena y la soledad que provocaron en mí la separación de mi ex y la lejanía cotidiana de mi hijito chico la pasé literalmente leyendo. De esto ya han pasado casi 5 años, en los que he aprendido a encontrar universos completos y complejos en los amados libros.
Ahora no me despego de ellos, siempre me verán con un libro bajo el brazo. Tengo harto que contar al respecto, leo en promedio un libro por semana (sólo leo en los trayectos casa-trabajo, cuando voy a buscar a Diego al colegio, etc.), de todos los tópicos -no soy excluyente- y de todos los autores. Me guio por intuición a la hora de elegirlos. He leído desde filosofía (Platón, Aristóteles, Nietzsche) hasta Coelho (no lo digo en forma peroyativa). Autores latinoamericanos y europeos. Africanos creo que no he leído.
De todo esto deseo contar algo, para quien quiera leerlo. Además también quiero comentar y recomendar, cuando sea pertinente, lo último que vaya leyendo, para aportar un granito de arena a crear más lectores, que realmente hace falta. El último libro que leí es "El Zorro, comienza la leyenda", de Isabel Allende, libro que comenté en el blog La Libélula. Estoy comenzando "Canción para caminar sobre las aguas", de Hernán Rivera Letelier, un autor que me gusta bastante del que por lo demás he leído todos sus libros. Dentro de poco hablaré de él.
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